martes, 14 de octubre de 2014

LA VERDAD.

Cuatro ciegos se reunieron para examinar un elefante. Uno de ellos tocó una pierna del elefante, y dijo: “El elefante es como un pilar”. Otro tocó la trompa, y dijo: “El elefante es como un grueso bastón”. El tercero palpó la barriga del animal, y dijo: “El elefante es como un gran tonel”. Otro le tocó una oreja, y dijo: “El elefante es como un gran abanico”. Los cuatro comenzaron a disputar acaloradamente acerca de la forma del elefante.
Pasó por allí un hombre y, viéndolos discutir, les preguntó: “¿Cuál es la causa de la disputa?”. Ellos le hicieron conocer sus opiniones y le pidieron que hiciera de árbitro. El hombre dijo: “Ninguno de ustedes ha visto al elefante. El elefante no es como un pilar, sus piernas son como pilares. No es como un abanico; sus orejas son como abanicos. No es como un bastón; su trompa es como un grueso bastón. No es como un tonel; su barriga es como un gran tonel. El elefante es la combinación de todas esas cosas: piernas, orejas, barriga, trompa…”.

1 comentario:

  1. La verdad no es unna posesión de unos pocos. Cada cual vive la vida a su manera; lo suyo, obedeciendo a su conciencia, y no hay dos iguales.

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